La Asociación Española de Consumidores (AEC) ha alertado sobre un preocupante incremento en los últimos meses de fraudes relacionados con la adopción de animales a través de redes sociales, en los que los estafadores que recurren a la buena fe de las personas interesadas en ayudar a animales necesitados para lucrarse de manera ilícita.
Las investigaciones de la AEC y las denuncias de los afectados apuntan a un esquema bien organizado que busca engañar y obtener ganancias económicas mediante falsas promesas.
Modus operandi
El fraude comienza con publicaciones en redes sociales que muestran fotografías de animales aparentemente disponibles para adopción. Las imágenes suelen estar acompañadas de descripciones emotivas que buscan captar el interés de los usuarios.
Una vez que las víctimas contactan con los supuestos responsables, siempre a través de WhatsApp, se les solicita un primer pago (normalmente de 125 euros) para cubrir los costes del transporte especializado, los trámites veterinarios y la colocación de un chip identificativo.
Sin embargo, esta cantidad no es el único desembolso que deberá hacer el usuario estafado: justo antes de la supuesta entrega, los estafadores exigen un segundo pago por la misma suma, alegando diversos motivos adicionales. Por supuesto, pese a cumplir con las exigencias económicas, las víctimas nunca reciben al animal.
En algunos casos, incluso, los estafadores 'se molestan' en 'informar' de que el animal ha fallecido antes del envío, cerrando cualquier vía de comunicación y dejando a los afectados sin reembolso. En otros casos, sencillamente no se vuelve a saber nada del …