El futuro de la movilidad urbana está en constante evolución, y ahora, una nueva tecnología podría estar lista para revolucionar el mundo de las bicicletas eléctricas tal como las conocemos. ¿Qué es esta innovación que promete cambiarlo todo? Se trata del hidrógeno, una alternativa que ofrece beneficios significativos en términos de rendimiento, durabilidad y sostenibilidad.
El hidrógeno, ya utilizado en automóviles, motocicletas, trenes y aviones, está listo para incursionar en el mundo de las bicicletas, ofreciendo modelos de alto rendimiento y autonomía mejorada. ¿Qué hace que esta tecnología sea tan atractiva? Para empezar, la carga rápida de la batería es una de sus principales ventajas. Mientras que una bicicleta eléctrica convencional puede tardar hasta cinco horas en recargarse por completo, una de hidrógeno como la Vufhy M de Pragma Mobility puede recargarse en tan solo dos minutos, ofreciendo autonomía de hasta 100 km.
Además de la rapidez en la recarga, el hidrógeno es una opción mucho más ecológica. La única emisión de estos vehículos es agua, lo que los convierte en una alternativa limpia y sostenible para el transporte urbano. La recarga también es sencilla; simplemente necesitas cambiar la cápsula de hidrógeno para suministrar energía a tu bicicleta, y puedes hacerlo fácilmente en casa gracias a un módulo de electrólisis.
Aunque esta tecnología ya está presente en China, donde las bicicletas de hidrógeno son utilizadas en grandes ciudades como Shanghai y Changzhou gracias a la startup Youon, pronto podrían llegar al mercado …