Hablar no es una actividad monótona, se requiere creatividad y práctica para aprender a expresarse de forma efectiva. Alejandro Jodorowsky es un maestro en el arte de la expresión y le gusta compartir sus conocimientos.
Como afirmaba Ludwig Wittgenstein, la mayoría de problemas que enfrentamos los seres humanos se deben a confusiones de origen lingüístico. Muchas veces usamos el lenguaje motivados por fines distintos a la simple expresión. Podemos querer reconfortar a alguien, convencer a otro para que haga lo que queramos o inventar una anécdota que nos sirva para fundamentar un consejo.
Debido a que le damos una gran multitud de usos diferentes al lenguaje, los malentendidos entre nosotros son constantes. Se nos hace extremadamente difícil dar cuenta de nuestros sentimientos, acciones y motivos, de manera que los demás puedan entendernos por completo.
"¡NO PERMITIRÉ QUE DIFAMES EL NOMBRE DEL ETERNO LÍDER TRUMP!".
Una de las actividades que nos pueden ayudar a expresarnos mejor es la lectura. Ampliar nuestro vocabulario es esencial para ilustrar nuestras emociones y comunicarlas a otros. Como seres esencialmente sociales, dependemos de nuestro lenguaje, no solo para sobrevivir, sino para disfrutar de una existencia próspera que nos acerque a la felicidad.
Decir que Alejandro Jodorowsky es polifacético es quedarse corto. A lo largo de su vida ha sido actor, titiritero, artista de circo, mago, director de cine, escritor de libros y cómics, músico, ensayista, filósofo, dramaturgo, guionista, etc.
Su rasgo más distintivo es su carisma. Jodorowsky se ha destacado en tantos ámbitos gracias a su gran talento artístico y a su …