Empecé a ver Alter Ego: La inteligencia invisible (en RTVE Play) un poco chinado porque lo primero que dicen es que «las capacidades de nuestro cerebro han sido replicadas por los ordenadores y esto no es así. Ni creo que llegue a serlo. Probablemente nunca, pero con toda seguridad no en mucho tiempo. Pero aún a pesar de haber empezado con mal pie la serie terminó por gustarme.
Presentada por Almudena Ariza y Carles Tamayo, se divide en tres capítulos que en total suman una hora y 40 minutos. El primero, ambientado en 2023, se titula «De humanos y máquinas», e introduce el tema. El segundo, situado en 2028, habla de la transformación laboral. El tercero, en 2033, trata de cómo el uso de las inteligencias artificiales ha cambiado el escenario geopolítico mundial.
La estructura de los tres es similar: Almudena está en una realidad claramente optimista, utópica de hecho, mientras que Carles está en una realidad claramente distópica. Cada uno en su «línea temporal va entrevistando a distintas personas expertas en el tema que hablan de distintos aspectos de esta tecnología.
Por supuesto que hasta que pase el tiempo no sabremos si las predicciones que van haciendo estas personas se cumplen o no, si son exageradas o si se quedan cortas; y personalmente creo que en los próximos diez años no veremos tantos avances como los que plantea la serie. Pero también creo que eso no es lo importante sino utilizar lo que cuentan para aprender acerca del campo …