Si hay algo que determina un juego, eso son las limitaciones. Las reglas, los recursos y las normas. Un juego es un conjunto de todos ellos y ahí está una de sus dos claves a la hora de entretener. La otra es cómo lo hace. Unificar ambas en un mismo juego es extremadamente difícil pero asegura tener altas probabilidades de éxito. Mini Metro aúna ambas de una manera casi perfecta. Y con este juego para iOS, uno se entretiene sin darse cuenta del paso del tiempo.
Mini Metro: cuando menos es más
Un mapa de color crudo. Tres figuras geométricas. Líneas de colores para conectarlas entre sí que transportan a los pasajeros entre las distintas estaciones. Una música de ajetreo diario que recuerda a las películas mudas de comienzo de siglo y efectos de sonido que acompañan a ese movimiento. Eso es lo que nos encontramos nada más lanzar Mini Metro en nuestro iPhone o iPad. De forma inmediata, el jugador sabe que está ante una app que se sale de lo común.
Lo divertido viene en cuanto empiezas a conectar las estaciones con líneas de metro. El objetivo del juego es conseguir que diminutas figuritas idénticas a las que representan las estaciones, lleguen a la estación que se corresponde con su forma. Triángulos, círculos, cuadrados, estrellas, pentágonos, rombos, diamantes. Todos ellos aparecen en una estación aleatoria y deben llegar a su destino para desaparecer. Son los pasajeros.
Como en todo simulador, lo …