Lo anunciado por Apple esta semana es la mayor inversión en la historia de la compañía en suelo estadounidense. Medio billón de dólares en escala larga (500 billones en la corta que usan los estadounidenses). Todo con un único fin muy relacionado con Apple Intelligence y que supone un movimiento geopolítico destacable en plena guerra comercial del país con China y con un Donald Trump estrenando (otra vez) el sillón presidencial de la Casa Blanca.
Ahora bien, se trata de una inversión un tanto engañosa. No porque no vaya a ser una realidad, algo que en cualquier caso deberá revisarse eventualmente, sino porque a efectos de comunicación se vende como un guiño hacia el nuevo presidente y sus políticas, aunque en realidad no es ni la primera inversión de Apple en suelo local, ni tampoco es algo que hayan decidido ahora a raíz de las elecciones.
Una inversión y un objetivo: servidores seguros
Apple anunció una inversión de 500.000 millones de dólares en Estados Unidos y que generará alrededor de 20.000 empleos. No será un regalo, claro está, sino que se trata de una iniciativa con la que, como describen algunos analistas como Mark Gurman, servirá para fabricar los semiconductores clave en el funcionamiento de Apple Intelligence.
En Estados Unidos nacerán ahora los servidores con los que Apple garantiza que su IA es segura. Y es que, como ya anunciaron en la WWDC 2024, Apple Intelligence se ejecuta en buena medida en …