A Sam Raimi hay que quererlo por varias cosas, pero por las Evil Dead se merece un templo. Ochenteras, descarnadas e irónicas como ellas solas, Ash vs Evil Dead se supone que es el regreso de las cintas originales al siglo XXI en formato serie. ¿El resultado? Una locura con sangre falsa a chorro, pero bastante divertida. Read more...