La historia del Oscar, la estatuilla que año con año la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográfica norteamericana premia a lo mejor del cine; suma muchos misterios. Desde su creación y el origen de su nombre hasta el hombre que sirvió de modelo para que el escultor George Stanley la creara en 1928. Una de esas historias relaciona al Premio de la Academia con el espacio, vía la NASA. Y todo tiene que ver con el oro.
Resulta que antes de 2016 la Academia mandaba a hacer las estatuillas con un fabricante de trofeos que colocaba en los Oscar en una aleación de estaño par luego chaparlos en oro. Esto producía que su brillo característico se fuera apagando con el tiempo. Buscando una opción que creara recubrimientos de oro duraderos y brillantes para sus estatuillas, la Academia recurrió a David Epner; el hombre que mejoro la técnica de la galvanoplastia; un método que se usa desde 1939, pero se inventó en 1805.
La galvanoplastia es la aplicación tecnológica de la deposición de metales mediante electricidad. El proceso se basa en el traslado de iones metálicos desde un ánodo a un cátodo, donde se depositan, en un medio líquido acuoso, compuesto principalmente por sales metálicas y ligeramente acidulado (electrolito).La empresa de David Epner, Epner Technology, con sede en Brooklyn, Es famoso porque su técnica de galvanoplastia asegura que el oro no se caiga.
El oro es útil en el espacio, porque es bueno para reflejar longitudes de onda infrarrojas de luz, …