Por desgracia, es normal que los criminales intenten hacerse pasar por compañías telefónicas. Las estafas en las que un delincuente afirma representar a una compañía están a la orden del día, como la de "marca blanca" de Movistar, pero ninguna está tan elaborada como la del falso comercial de Jazztel. Se trata de un engaño que parece de película por todos los detalles que aúna. Los clientes de dicha empresa deben tener mucho cuidado con ella.Los estafadores saben todo de la víctimaTodo comienza cuando la víctima es llamada por un supuesto comercial de Jazztel. No se trata de un comercial, sino de alguien que se está haciendo pasar por él. El problema radica en que la llamada resulta extremadamente convincente, puesto que el comercial conoce los datos de ella. Al contrario que en otras estafas, no pide datos.El delincuente realiza una oferta irrechazable, que suele ser ofrecerle un móvil de alta gama a cambio de extender la permanencia. La única condición es que la víctima escanee un código de barras adjuntada en un documento de la caja del móvil. Es una oferta demasiado buena como para rechazarla, además, la llamada resulta muy convincente. Contra todo pronóstico en una estafa, el móvil llega. Además, quien lo entrega suele ser alguien que parece un comercial de Correos. Viste igual e incluso le da a la víctima un albarán de recogida.Lo llamativo de la estafa es lo elaborada que estáLo extraño comienza cuando el móvil viene sin código de barras. Es entonces cuando …