La NASA sigue trabajando en el X-59, un nuevo avión supersónico experimental que busca reducir la explosión sónica. En esta ocasión la Agencia ha dado a conocer las pruebas realizadas en un modelo a escala dentro de un túnel de viento que permiten comprobar las predicciones de los ingenieros encargados del proyecto.
Con este proyecto la NASA espera que la prohibición de vuelos supersónicos comerciales pueda levantarse, remplazando el fuerte estampido sónico del pasado por un "golpe" más suave.
El estampido sónico ocurre cuando las ondas de choque de un objeto que viaja por el aire más rápido que la velocidad del sonido se fusionan antes de llegar al suelo, generando enormes cantidades de energía sonora, aproximadamente 110 decibelios, o lo equivalente al sonido de una explosión o de un trueno.
Probando los modelos elaborados por computadora
Con el diseño del avión X-59 Quiet SuperSonic Technology (QueSST) la NASA busca reducir este estampido, haciéndolo más silencioso, para lo que recientemente pusieron un modelo a pequeña escala del avión en el túnel de viento supersónico Glenn de la NASA para visualizar si los modelos que hasta ahora habían elaborado coincidían con la realidad.
Imagen: NASA Glenn
Los resultados de los test fueron ondas de choque capturadas por cámaras especiales y sensores, además de imágenes Schlieren que permiten a los ingenieros visualizar las ondas y sus posiciones a medida que el aire pasa por …