Las moscas de la fruta esconden en su interior los genes Halloween.
Mutaciones en estos fragmentos de ADN provocan que sus embriones adquieran una apariencia fantasmagórica.Cada 31 de octubre se celebra Halloween, un término que procede de la contracción ‘All Hallows’ Eve’ o víspera de Todos los Santos. La festividad, importada de Estados Unidos aunque cuente con raíces celtas, es una de las fechas más retratadas en el mundo del cine y de la literatura. Lo que pocos saben es que esta celebración con calabazas, brujas y fantasmas también es homenajeada a diario por científicos de todo el mundo.
Los genes Halloween regulan el desarrollo embrionario de las moscas de la frutaTodo comenzó en el año 1995, cuando la Academia sueca anunció el Premio Nobel de Medicina o Fisiología. El galardón reconoció el trabajo de Christiane Nüsslein-Volhard, Eric F. Wieschaus y Edward B. Lewis, cuyas investigaciones permitieron elucidar el control genético del desarrollo embrionario temprano.
Los tres científicos se centraron en un modelo de experimentación ampliamente utilizado, la mosca de la fruta, conocida técnicamente como Drosophila melanogaster, para comprender qué mecanismos moleculares regulan las primeras fases en el desarrollo de cualquier ser vivo.
Katja Schulz (Flickr)
Las moscas que volaron hacia el Nobel
Sus pioneros estudios permitieron determinar algunos de los genes clave para la organización y la formación de los segmentos de las larvas de las moscas, según publicaron en la revista Nature. Cuatro años más tarde, los mismos investigadores identificaron una serie de mutaciones que causaban una serie de defectos en el …