A lo largo del día, en todo el ancho mundo, millones de personas mascan chicle en grandes cantidades. Lamentablemente, los restos de goma de mascar terminan por quedar embarrados en las banquetas, los tubos del metro, las ramas de los árboles y un sinnúmero de lugares.
En un intento por encontrarle un uso útil a los chicles mascados y demostrar el gran problema que es tirarlos en la calle, tres compañías se unieron en un nuevo proyecto: la organización de publicidad holandesa Iamsterdam, la compañía de diseño Explicit Wear y la organización antichicles Gumdrop.
“Empezamos a buscar una forma de concienciar a la gente sobre este problema [...] Fue entonces cuando la idea nos llegó de golpe: crear un producto que la gente realmente quiere de algo que a nadie le importa”, dijo Jonathan Van Loon, vocero del proyecto.
Después de pensarlo un poco, las empresas llegaron al acuerdo de fabricar unos tenis con todas las gomas de mascar que lograron juntar por las calles de Ámsterdam, Holanda. El proyecto tenía como fin concientizar a la gente sobre la enorme cantidad de chicle que se tira a las calles la ciudad (más de dos kilos al día), pero su éxito fue tanto que muchos amantes de los chicles de todo el mundo empezaron a preguntar en dónde podían comprar un par de estos tenis.
Ante tal demanda, los responsables del proyecto decidieron lanzar los Gumshoes, unos tenis realizados con chicles reciclados. Gumdrop aportó la tecnología de reciclaje, que les permiten fabricar Gum-Tec, un material …