Si algo re-descubrí cuando nos mudamos a la Ciudad de México en 2012 fue el gusto por andar en bicicleta. Todo inició en septiembre de 2013 cuando cambiamos a nuestro hijo de guardería, la cual quedaba a una distancia mayor de casa. Llevarlo caminando ya no fue opción, tampoco lo fue en auto debido al tráfico. La bicicleta se convirtió en la mejor alternativa.
Con experiencias similares, miles de personas descubren cada año que la bicicleta se convierte en el mejor medio de transporte para su vida cotidiana. Esto es una buena noticia. Pero también es cierto que otras tantas siguen indecisas principalmente por el riesgo que trae consigo. A pesar de esto, la bicicleta se está convirtiendo en un medio de transporte con un futuro brillante en CDMX.
La gran mayoría de nosotros tuvimos una bicicleta en nuestra infancia. La disfrutamos aún en sus momentos de caídas pues tal experiencia solía suceder en ambientes controlados (parques o patios). Pero luego crecimos y la abandonamos por considerarla un mero juguete en lugar de un medio de transporte. Al menos así acontece en México más no en otros países, como Japón.
En mi caso, el haber re-descubierto a la bicicleta me ha permitido arraigar valores e identificar capacidades y resistencias físicas que no tenía idea poseyera.También me ha permitido conocer personas y descubrir la belleza (y fealdad) urbana de la CDMX y de su zona metropolitana que en auto o caminando no se aprecia.
El punto es que la …