Bowers & Wilkins tiene una fama muy merecida en el mundo del audio, tanto en el mecado de la alta fidelidad, como en el mercado profesional. No en vano, la marca tiene la distinción de que sus monitores de estudio sean considerados los más transparentes del mundo por los ingenieros de sonido de los prestigiosos Abbey Road Studios, hogar de muchas grandes obras de bandas míticas.Lo que tampoco se puede negar es que, ya sea el caso de Bowers & Wilkins o de cualquier otro fabricante relacionado con el mundo de la HiFi, se han visto obligados a evolucionar hacia el audio de consumo. Y hoy en día, con la competencia tan feroz que hay en el mundo de los auriculares (ya sean earbuds TWS o de diadema), conseguir un producto que esté a la altura de lo más exigente del mercado es crucial.Por ahora puedo adelantar que lo de estos Bowers & Wilkins Pi8 es muy bestia por las razones adecuadas. Teniendo en cuenta la mano de hierro con la que el grupo Harman en general (y JBL en particular) está dominando ya no sólo el campo del I+D, sino también el mercado, encontrarse con una propuesta como esta del fabricante británico resulta refrescante (y tenerlos muy bien puestos, también).¿Por qué digo todo esto? Lo tendréis que leer en las líneas que vendrán detrás de esta. Lo que sí os puedo decir es que estos Pi8 son firmes candidatos al trono de la gama alta por derecho propio. Y …