La Comisión Europea ha presentado este martes una estrategia en tres fases para impulsar la cooperación y el intercambio de datos entre los países de la Unión Europea para evaluar los riesgos a la seguridad del despliegue de las redes 5G y diseñar medidas de control, pero ha evitado pedir medidas frente a las dudas que plantea el avance de la multinacional china Huawei
como reclamó Estados Unidos.En primer lugar, Bruselas pide a los gobiernos de la UE que lleven a cabo evaluaciones de riesgo a nivel nacional, de aquí al próximo junio, con el objetivo de identificar posibles amenazas y también para poner al día sus medidas de protección.
Después, el Ejecutivo comunitario quiere que estos exámenes sean puestos en común a nivel europeo y que, con la ayuda de la Agencia Europea para la Ciberseguridad (ENISA), se cumpla una evaluación de riesgo conjunta a más tardar en octubre de 2019.
En esta segunda fase del plan comunitario, que no es vinculante pero da pautas a los Estados miembros para avanzar en la materia, los países podrán coordinar acciones a nivel nacional, como pruebas o controles de certificación y la identificación de productos o proveedores considerados «potencialmente inseguros».
El desenlace de la estrategia llegará a finales de este año, cuando la Comisión espera poder desarrollar un paquete de medidas que puedan imponerse tanto a nivel nacional como europeo para contener los riesgos y vulnerabilidades para las infraestructuras clave de la Unión Europea, incluso con estándares mínimos comunes de …