Posibilidades, innovación, polémica, temores y… efectos negativos sobre el planeta. Todo eso esta saliendo en el unboxing de nuestro nuevo juguete: la inteligencia artificial.
Por ello, el Fondo Monetario Internacional propuso la idea de que la creación de un nuevo impuesto podría “orientar” a las empresas para que trabajen en la reducción de sus emisiones de CO2, que inevitablemente va a aumentar. Te explicamos.
Todo es nuevo alrededor de la inteligencia artificial. Por ello empresas y gobiernos están trabajando para poner orden sobre cómo vamos sacarle provecho, pero también cómo vamos a lidiar con sus aspectos negativos, entre ellos el daño ambiental.
El Fondo Monetario Internacional presentó el la propuesta titulada “Las emisiones de carbono de IA y las criptomonedas están aumentando y la política fiscal puede ayudar”.
El documento explica que la huella de carbono de los centros de minería de criptomonedas y los centros de datos para IA ya representaban el 2% de la electricidad que usaba en el planeta en 2022 y está en aumento. Advierte que esas máquinas de operación están “hambrientas de energía”.
La inteligencia artificial contamina, y mucho
Las discusiones suelen calentarse cuando se trata de cambio climático, así que vayamos a los hechos: Según los datos presentados por el FMI, realizar una sola transacción de Bitcoin “requiere casi la misma cantidad de electricidad que usa un habitante de Pakistán o Ghana en tres años”. Impresionante.
¿Y sobre la Inteligencia …