El funcionamiento de los alcoholímetros se basa en dos técnicas: las células electroquímicas o los sensores de infrarrojos.
Aunque uno de los principales enemigos de los conductores debería ser el alcohol, muchos tienen una idea equivocada de la situación y consideran que los malos de la película son, en realidad, los alcoholímetros.
Sin embargo,… Seguir leyendo...