El HomePod mini dio con la tecla. Después del fin de las ventas del modelo original que no consiguió cumplir objetivos a pesar de una bajada de precio, los 99 euros del pequeño altavoz han logrado que muchos pongan no uno si no varios en sus casas. Yo mismo tengo uno en mi salón y otro en mi habitación, consiguiendo así que la música llegue a todos los rincones de mi casa.

Ahora bien, hay una pregunta que más de una persona me ha lanzado: ¿se puede colocar un HomePod en el baño? No hay impedimento físico en ello, pero ¿es posible que el altavoz se deteriore o sufra daños? Vamos a ver qué riesgos podemos tomar si decidimos probarlo.

En su web oficial, Apple deja claro que el HomePod mini está pensado para colocarse en las estancias de tu casa. Pero el baño es una habitación en la que, duchas mediante, suele concentrarse mucha humedad. Sobre eso no hay aclaración concreta, pero sí que podemos leer esto en las especificaciones técnicas del altavoz:

Requisitos ambientales: Humedad relativa: del 5 al 90 % sin condensación

Las palabras clave son "sin condensación". En un baño donde una familia se ducha a diario la humedad suele llegar al 100% y el agua puede empapar cortinas, paredes y resto de superficies. Incluyendo la del HomePod, cuya malla exterior es porosa. Resultado: esa agua condensada puede filtrarse en la parte interna del altavoz y provocar daños.

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