Windows regresa a la carga con problemas y dará más de un quebradero de cabeza a los usuarios. Y eso que es el sistema operativo con mayor cuota de mercado. Pero parece no importarle porque la última actualización de Windows 10, conocida como «October 2018 Update», llegará el próximo mes de octubre, como su propio nombre indica, y con un fallo importante.
Cuando un usuario actualiza el sistema operativo de su dispositivo, lo normal es que se le avise en caso de no disponer de espacio suficiente para instalar el nuevo software. Las nuevas versiones siempre conllevan mejoras y novedades y, por tanto, ocupan más espacio de almacenamiento. Ante este panorama, se informa al usuario de que no hay suficiente espacio y que debe liberar información de parte del disco duro para poder actualizar el sistema operativo.
El problema es que esta actualización de Windows no detecta cuánto espacio libre queda en el equipo para poder instalar la nueva versión. Tampoco informa al usuario de que es imposible cargar «October 2018 Update» porque no hay espacio. Simplemente, el ordenador se bloquea y el usuario no sabe las razones.
«En los sistemas Microsoft Windows 10 que tienen poco espacio de almacenamiento de información (como clientes ligeros o sistemas incrustados), al ejecutar Windows Update, la inicialización de actualización puede fallar», explica la compañía en su blog, porque «Windows Update no comprueba los requisitos de espacio en los sistemas antes de que inicie el proceso».
Por esta razón, la compañía aconseja que, …