Los datos del usuario tienen valor. Tanto para las tecnológicas que los tratan y los emplean para sacar réditos económicos, como para los cibercriminales, que los explotan para lanzar ataques o para hacer negocio en la 'dark web'. Así lo demuestran casos como la reciente reaparición de un paquete de información perteneciente a 532 millones de usuarios de Facebook (11 de ellos españoles) que fue robada el pasado 2019. O la fuga sufrida por la plataforma orientada al mercado laboral LinkedIn, que afectó a otros 500 millones de internautas.
Entre los datos filtrados de Facebook, figuran números de teléfono, ID de la cuenta de la red social, correos electrónicos, nombres completos, fechas de nacimiento y ubicaciones. En lo que se refiere... Ver Más