Todo lo que tenía que hacer el artillero a los mandos era poner el avión enemigo en el centro del visor y apretar el gatillo. Con esta frase explicaban los manuales de 1942 cómo se operaban las torretas del Boeing B-29. Detrás de esa simplicidad había un sistema de puntería que aún hoy es una maravilla de la ingeniería.Read more...