Los ciudadanos de Nueva York que estén interesados en adquirir una nueva impresora 3D pronto se verán obligados a someterse a una revisión de sus antecedentes criminales, una vez que se apruebe un nuevo proyecto de ley a nivel estatal.
Los delincuentes condenados que no pueden adquirir legalmente un arma de fuego a menudo optan por la impresión en 3D de piezas individuales para crear un «arma fantasma» que resulta imposible de rastrear.
El proyecto de ley va dirigido contra cualquier «impresora tridimensional vendida en este estado, que sea capaz de imprimir un arma de fuego, o cualquier componente de un arma de fuego» y exigiría a los vendedores del estado que soliciten u una verificación de antecedentes penales. Según el texto del proyecto de ley, los servicios de justicia tendrán hasta 15 días para revisar los antecedentes penales del comprador y decidir si puede comprar la impresora.
Además, se prohibirá la venta de dichas impresoras a individuos con antecedentes penales que les impidan legalmente poseer un arma de fuego.

Si bien las impresoras 3D técnicamente no son imprescindibles para la creación de armas fantasma no rastreables, pueden ser utilizadas para fabricar componentes individuales, sistemas de disparo o, en ciertas situaciones, armas de fuego completamente funcionales.
En la red, se pueden encontrar modelos en 3D disponibles de forma gratuita que pueden ser descargados y producidos utilizando materiales comunes.
Sin embargo, las armas que presentan una mayor durabilidad, capaces de soportar más de unos cuantos disparos, generalmente requieren componentes metálicos que no pueden ser fabricados …