Un estudio en Nature Ecology & Evolution prueba que la contaminación de origen humano ha llegado al lugar más recóndito de la Tierra.
Compuestos químicos prohibidos han alcanzado las profundidades oceánicas.Un equipo de investigadores ha descubierto la primera evidencia de que la contaminación provocada por los seres humanos ha alcanzado los sitios más recónditos del planeta. A más de diez mil metros de profundidad, bajo el océano y muy lejos de zonas industriales, se localizan las fosas de las Marianas y de Kermadec, donde los científicos han encontrado compuestos químicos prohibidos desde hace más de cuarenta años.
Es la primera evidencia de que la contaminación de origen humano ha alcanzado las profundidades oceánicasEl trabajo, publicado en la revista Nature Ecology & Evolution, muestra el hallazgo de "niveles extremadamente altos de contaminantes orgánicos persistentes" en el tejido graso de algunos organismos vivos procedentes de las profundidades oceánicas. En particular, los investigadores muestrearon tres especies diferentes de anfípodos, un tipo de crustáceos muy pequeños que habitan en las fosas de las Marianas y en la fosa de Kermadec. Sus resultados prueban que los seres vivos estaban contaminados por compuestos químicos como los bifenilos policlorados (PCB) y los polibromodifenil éteres (PBDE).
"Todavía pensamos en el océano profundo como un reino remoto y prístino, a salvo del impacto humano, pero nuestra investigación muestra que, lamentablemente, esto podría no ser cierto. Los anfípodos que muestreamos contenían niveles de contaminación parecidos a los hallados en la Bahía de Suruga, una de las zonas industriales más contaminadas …