Sí, los televisores OLED han resuelto en gran medida el problema del «negro que no es negro», pero tienen dos detalles: Aún cuestan una fortuna (el promedio supera los 800 euros), y el riesgo de burn-in (técnicamente burn-out) no se ha ido a ninguna parte. Si bien existen algunas alternativas, Matt del canal DIY Perks […]