En uno de los momentos más delicados en cuanto a la seguridad y privacidad en la red, donde las tecnológicas se encuetran en entredicho por escándalos de todo tipo, un nuevo fallo en sistemas que había probado su robusted se vuelve a repetir. Esta vez afecta a uno de los servicios más utilizados a nivel mundial y en el que más gente confía: el correo electrónico. Varios investigadores europeos de la Electronic Frontier Foundation (EFF) han descubierto no uno, sino dos vulnerabilidades que afectan al cifrado de los emails: es decir, a la «llave» que permite que nadie, excepto emisor y receptor, pueda acceder a lo que se envía.
Este problema afecta a dos sistemas usados desde hace años: PGP y S/MIME. En concreto, sus fallos dejan al descubierto todo el contenido cifrado de los mensajes, dando la posibilidad a los ciberdelincuentes de convertir cualquier mensaje protegido por esta tecnología en texto plano y totalmente legible, lo que significa que cualquiera de los emails que mandes (y hayas mandado con anterioridad) con este tipo de cifrado, con los conocimientos adecuados, será tan fácil de leer como abrir un SMS desde tu propio móvil.
Encriptación para blindar los emails
«EFF puede confirmar que estas vulnerabilidades representan un riesgo inmediato para quienes utilizan estas herramientas para comunicarse por correo electrónico, incluida la posible exposición de los contenidos de mensajes anteriores», afirman los expertos en ciberseguridad en un comunicado remitido esta madrugada y que será ampliado en las próximas horas. El problema es …