Los analistas de Kaspersky detectaron un nuevo paquete malicioso de programas -distribuidos en forma de un archivo único de instalación, un archivo autoextraíble u otro con funcionalidad de instalador- dirigido a los gamers en YouTube.
Su principal carga útil es el extendido RedLine stealer, uno de los troyanos más utilizados para robar contraseñas y credenciales de los navegadores.