Leigh Whannell, conocido por su trabajo en las franquicias de Saw e Insidious, y Blumhouse, la famosa productora de títulos de terror, están detrás de este thriller de venganza con elementos de ciencia ficción que te hará darle una vuelta al futuro que nos espera si acabamos siendo dominados por la tecnología. Su propio director confiesa que películas de ciencia ficción de los años 80, como Robocop o Terminator, le sirvieron de inspiración para crear esta historia, que explora el eterno conflicto entre la humanidad y las máquinas.Al margen de su temática, la cinta destaca por su estética visual futurista y las innovadoras técnicas de filmación que utiliza, como girar la cámara 90 grados durante las escenas de pelea para crear una acción fluida. Además, cuenta con giros argumentales que mantienen al espectador enganchado y tiene un protagonista que te resultará familiar: Logan Marshall-Green, que por su aspecto físico y sus expresiones faciales podría ser el hermano de Tom Hardy, un parecido que ha sido mundialmente reconocido y comentado en medios internacionales, y curiosamente ambos tienen edades muy similares.Un hombre obsesionado con vengarse y una IA que le ayudará a hacerlo… ¿sin pedir nada a cambio?La historia sigue a Grey Trace (Logan Marshall-Green), un mecánico que sufre un brutal atraco que le deja paralítico y que culmina con el asesinato de su esposa Asha (Melanie Vallejo). Sumido en una depresión y bajo el cuidado de su madre, Grey recibe una visita de Eron Keen (Harrison Gilbertson), un misterioso inventor multimillonario …