* Por Martín Cancelare, Director Comercial de CoasinLogicalis.
La implementación del 5G promete revolucionar todos los mercados e industrias. Y la oportunidad de capitalizar sus redes de manera efectiva y rápida suena tentadora. Pese a sus grandes beneficios, su puesta en marcha tiene un alto costo de inversión y, aunque muchas empresas de telecomunicaciones están en números rojos, se están viendo presionados por una tecnología que prontamente predominará nuestras vidas.
Hace cinco años, las telcos cobraban por productos que ya no existen o son obsoletos. La evolución de las aplicaciones de teléfono permitió que los mensajes de textos pasarán al tacho de la basura y hoy sirvan solo para autenticar transacciones. Caso similar con los minutos que ahora son mayormente ilimitados. Todo lo que existía se reemplazó y provocó que los niveles de rentabilidad de las empresas bajaran drásticamente, obligándolas a buscar nuevas formas de ganancia.
Hoy existe una gran competencia entre el mundo de las telecomunicaciones y las aplicaciones Over The Top (OTT), que son aquellas en que el usuario no paga a una compañía por transferir datos (como Whatsapp). Estas últimas han logrado entrar al terreno con fuerza, presionando a las telco a implementar nuevos anchos de banda. Sin embargo, esta misma acción beneficia a muchas aplicaciones OTT que venden publicidad, mientras las telco no reciben ganancia.
Son estas razones las que dificultan ofrecer un servicio cautivador y de gran nivel como el 5G para las empresas de telecomunicaciones. El problema es que, pese a ser una inversión enorme, lo …