El pasado mes de agosto, la compañía WeWork -miembro del selecto club de los 'unicornios' y símbolo del auge de la cultura del coworking- tomó la decisión de salir a bolsa. Sin embargo, lo que parecía un paso más en el camino de crecimiento de la compañía no hizo sino desencadenar la fulgurante caída de la misma... y amenaza con ir mucho más allá.
Los analistas señalaron que la información preliminar facilitada a los supervisores financieros evidenciaba la debilidad de la compañía: las valoraciones en torno a la compañía eran demasiado optimistas, las métricas usadas estaban convenientemente adaptadas para esconder pérdidas y nadie entendía muy bien la estructura interna de la empresa.
Los planes para la salida a bolsa tuvieron que cancelarse a las pocas semanas, y ya preparan el despido de miles de empleados por todo el mundo. Pero ahora las dudas están afectando al conjunto del entorno económico que situó a WeWork como una de las startups más valiosas de Silicon Valley.
¿Una nueva burbuja puntocom?
En El Blog Salmón lo resumían con estas palabras: "¿Es WeWork el canario en la mina? ¿estamos ante el fin de la nueva burbuja puntocom inflada por fondos como Vision Fund?". La edición de 2019 del informe anual 'State of Startups', elaborada por la firma de capital riesgo First Round Capital y publicada esta misma semana tiene una respuesta a esta pregunta. Y es verdaderamente desalentadora.
En Xataka
La gente de la …