El nuevo paquete de «emojis» que llegará a mitad de año incluirá, entre sus nuevas 117 propuestas, uno especialmente importante para la comunidad italiana. Se trata de una mano pellizcándose los dedos. Los usuarios ya han interpretado que se trata de un gesto asociado las personas procedentes de Italia. De ahí a que lo hayan bautizado como la «mano italiana» al evocar cierta incredulidad o frustración dependiendo del contexto.
La decisión de incorporar nuevos diseños a la larga lista de esos simpáticos recursos visuales tan populares en las aplicaciones de mensajería no es un asunto baladí. Transciende a culturas, por lo que uno de los requisitos del Consorcio Unicode, institución encargada de aprobar los «emojis», es la universalidad de los diseños. Hace cuatro años se añadió el «emoji» de la paella después de que se realizara una campaña a favor que duró varios meses.
El mayor riesgo es que los «emojis» disponibles en los distintos servicios de mensajería y sistemas operativos es inducir al error y a la confusión. Dependiendo de las culturas (no es lo mismo en Asia que en Occidente), su significado puede variar. Es más, los aparentemente inocentes iconos de la berenjena o el melocotón han sido utilizados por muchos usuarios como declaraciones sexuales, lo que ha obligado a las compañías tecnológicas a vigilar su uso por posibles casos de acoso sexual entre usuarios.
Algo parecido ha empezado a suceder con este gesto de los «dedos pellizcados». En función de la región en donde se encuentre, …