El plástico es un material muy contaminante porque se descompone lentamente, lo que provoca que cada vez está más presente en el aire. Sin embargo, esto podría solucionarse mediante el "plástico viviente", un nuevo tipo de plástico que se autodestruye más rápidamente tras finalizar su vida útil, lo que le permite descomponerse en la mitad de tiempo de lo normal.Bacterias que se comen el plásticoLa clave de este hallazgo son unas proteínas que se comen el plástico. Algunas bacterias son capaces de producirlas, y, precisamente por ello, los científicos pusieron el ojo en ellas. Las primeras bacterias con esa capacidad se hallaron en 2016 en una planta de reciclaje de Japón y luego se descubrieron otras.Lo que hicieron los científicos fue crear versiones artificiales de estas bacterias. Introdujeron esporas bacterianas en el plástico, las cuales contienen las proteínas (enzimas) necesarias para la descomposición. Cuando el plástico se empieza a erosionar, se activan las proteínas y comienza la descomposición.Concretamente, las esporas se introdujeron en un tipo de plástico llamado policaprolactona, también conocido por sus siglas, PCL. Cuando el material empieza a deteriorarse, o sea, erosionarse, se liberan las proteínas para realizar la descomposición.¿Cómo lo consiguieron? Los científicos introdujeron el gen de una enzima llamada lipasa, producida por la bacteria Burkholderia cepacia, en otra bacteria con nombre Bacillus subtilis, la cual es resistente a grandes temperaturas. Cuando el plástico se degrada, la bacteria se "despierta" y produce las enzimas que destruyen el plástico. Por si fuese poco, los científicos añadieron otra lipasa …