Vi que en The Guardian hablaban de El imperio de los chimpancés (Chimp Empire, 2023, Netflix) como si fuera «Succession, pero con simios» y lo describían como «una historia de traición, conflicto y luchas de poder». Así que como solo eran 4 episodios que se pueden ver en una maratón, a ello que me puse.
Humanos y chimpancés compartimos el 98% de nuestro código genético&ast, de modo que es normal que los llamemos «primos lejanos» y que en sus gestos, movimientos y comportamiento nos resulten tan familiares. Yo no soy muy de documentales de animalitos, pero los chimpancés siempre me han caído simpáticos, más que los pulpos o los dragones de Komodo. Así que me resultó entretenido ver las familias/manadas de chimpancés de todas las edades, desde los recién nacidos de 1 a 3 años hasta la más viejecita, de 65, haciendo… sus cosas de chimpancés.
El documental narra cómo es la vida cotidiana de los chimpancés de Ngogo (Uganda) y los conflictos que surgen en dos grupos, los «centrales» y los «occidentales», tanto dentro de ellos como para conquistar territorio. Está la parte de cómo consiguen alimentos, cuál es la jerarquía y cómo practican el grooming (acicalamiento social) que tan importante les resulta para desparasitarse y establecer relaciones de amistad, poder y sometimiento. Por otro lado está cómo cada grupo defiende su territorio, explora y lucha para conquistar nuevas zonas con recursos, como árboles frutales.
Visto sin preguntarse nada más, el documental es genial. Pero naturalmente hay que salirse …