Desde la llegada de los Apple Vision Pro ha surgido un debate: ¿estamos presenciando el principio del fin de los smartphone como los dispositivos principales de nuestras vidas? Quizás unas gafas inteligentes acaben volviendo obsoleta la idea de un ordenador en nuestro bolsillo. Pasará tiempo antes de poder verlo, pero la idea ya está ahí. Microsoft se ha rendido con las Hololens y META parece dar palos de ciego entre ideas caras y productos baratos —las Meta Quest 3S para más señas—, así que tal vez sea Apple quien pueda aprovechar la ocasión.
Sin embargo, puede que el fin de esa era no venga abanderado por un visor, o unas gafas. El creador de ChatGPT Sam Altman cree conocer la siguiente gran revolución tecnológica, y se ha aliado con Jonathan Ive y el propietario de Softbank para hacerla realidad. Jonathan Ive lleva ya un tiempo construyendo su propio imperio, y ya lleva más de un año afiliado a una de las empresas que podrían rivalizar con Apple en el futuro, OpenAI. Juntos están construyendo lo que, según palabras de Sam Altman, sería "el iPhone de la IA", el dispositivo definitivo que simplifique los procesos de comunicación y usabilidad para integrar el emporio de GPT en algo nuevo, algo diferente.
La IA no necesita de pantallas
Por otro lado, Apple está tocada. En lo laboral tiene un par de frentes legales que resolver. Y los 13.000 millones de multa en Irlanda —que destinará …