El día en que Jonathan Ive presentó el primer prototipo a Steve Jobs no tuvo que ser muy fácil. A pesar de lo que podamos pensar ahora, el factor forma del dispositivo no estaba nada claro - de hecho, era algo que necesitaba tanta exploración que nadie puedo imaginar como iba a ser ese misterioso iPhone antes de su lanzamiento.
"¡Necesitamos al menos un botón, Steve!". En aquel momento, Jobs no quería nada que visualmente rompiera la apariencia del dispositivo, su iPhone soñado era un rectángulo perfecto en proporciones sin ningún elemento más. "No es posible, necesitamos ese botón para volver atrás o la gente no va a entender nada", afirmaba un Ive partícipe el minimalismo. Pero no tanto. Sin embargo, parece que ahora la tecnología va a poder materializar la visión de Jobs. Aunque, eso sí, no a corto plazo.
Un iPhone todo pantalla, y sin ningún botón
El iPhone era tan revolucionario y un cambio de mentalidad tan acentuada que no podía añadir más cambios. A la gente le parecía casi magia usar los dedos para alejar o acercar la imagen, y muchos pensaban que un teclado en pantalla iba a ser completamente inservible. No podían quitarle más cosas porque podrían llegar a causar un rechazo en los posibles compradores.
Si en aquel momento nos dicen que tendríamos hoy un dispositivo que se desbloquea mediante nuestro rostro, probablemente nos hubiera parecido ciencia ficción. En realidad, para ser justos, el iPhone todo pantalla …