Un teléfono móvil conectado es, a todos sus efectos, un pequeño ordenador de bolsillo. Por sus prestaciones, estos aparatos son cada vez más herramientas de trabajo. Su arquitectura y ecosistema permite realizar múltiples actividades y tareas con gran solvencia, al menos en los modelos más avanzados. Todavía, empero, muchos de los programas informáticos empleados por los consumidores no están los suficientemente adaptados al entorno móvil.
Tomando como desafío superar este obstáculo, muchos fabricantes de tecnología han venido desarrollando sistemas para «convertir» a un móvil en un PC convencional. De ahí la aparición de «gadgets» curiosos como el Dex Pad de Samsung que permite conectar el terminal a un monitor y teclado para aprovechar, más o menos, las prestaciones como si se tratase de un ordenador ad hoc. No dejan, sin embargo, de ser apaños para verlo en pantalla grande, por lo que los usuarios más exigentes se encuentran en que algunas tareas que desempeñan sobre sus equipos no pueden realizarlas como les gustaría en un móvil.
Microsoft, que perdió la batalla móvil y desaprovechó la adquisición de Nokia, lleva trabajando al menos dos años en un interesante dispositivo móvil de pantalla plegable que dispone de un modo ordenador. El proyecto, que se conoce internamente como Andromeda, ha salido a la luz después de la filtración de unos correos internos a los que ha tenido acceso el medio especializado «The Verge». En ellos se especifican algunos detalles al respecto de esta iniciativa que tomaría de base una doble pantalla plegable …