2015 ha sido un año especialmente complicado para Qualcomm, esto debido a que su procesador estrella, el Snapdragon 810 se vio envuelto en una serie de controversias, que si por la potencia o por el calentamiento, el punto es que desde un inicio el 810 tuvo bastantes problemas, que se fueron acumulando cuando algunos fabricantes decidieron no usarlo en sus dispositivos gama alta, o bien, optaron por el Snapdragon 808, e incluso hubo una segunda versión del 810, que al parecer resolvía los problemas de calentamiento. En mi caso, tuve oportunidad de analizar dos equipos con este procesador, el LG G Flex 2 y el HTC One M9, y sólo en el LG presencié los problemas de rendimiento, mientras que en el HTC el calentamiento se hizo presente, pero aquí hay que destacar más la construcción del equipo y sus materiales, más que un problema del procesador. Lo anterior hizo que Qualcomm dedicara sus esfuerzos a cambiar la comunicación y la imagen que se tenía en esos momentos de la compañía, por ello vimos como desde el mes de marzo se daban adelantos del nuevo Snapdragon 820, además de que mes con mes se soltaban pequeñas pistas con lo nuevo que incorporaría este SoC. Pues todo parece indicar que Qualcomm está orgulloso de su nuevo bebé y eso significa presumir en todo lo alto sus capacidades, por ello nos dirigimos a sus oficinas centrales en la ciudad de San Diego, en California, para realizar a los primeros benchmarks al …