América Latina se encuentra en un momento clave para liderar la transición energética global. Un país de la región ha descubierto un recurso que podría cambiar su futuro: una fuente infinita de energía, pero con una gran diferencia respecto al tradicional "oro negro". Aquí, el protagonista es el hidrógeno blanco, una alternativa limpia y sostenible que promete revolucionar el panorama energético.