Estados Unidos y China acordaron reiniciar las conversaciones comerciales, después de que el presidente Donald Trump ofreciera concesiones que incluían la renuncia a nuevos aranceles y una flexibilización de las restricciones a la empresa tecnológica Huawei para reducir las tensiones con Pekín.
La administración Trump ha dicho que la firma china está demasiado cerca del Gobierno de China y representa un riesgo para la seguridad nacional, y ha presionado a los aliados de Estados Unidos para que mantengan a Huawei fuera de las infraestructuras de telecomunicaciones de próxima generación 5G.
El Departamento de Comercio de Trump ha puesto a Huawei en su “lista de entidades”, prohibiendo en la práctica que la empresa compre piezas y componentes de empresas estadounidenses sin la aprobación del Gobierno de Estados Unidos.
Ahora, Trump le hizo una ofrenda de paz a Xi en torno a la cuestión de Huawei Technologies Co, el fabricante de productos para redes de telecomunicaciones más grande del mundo, para retomar relaciones.
El mandatario estadounidense dijo que no creía que la prohibición fuera justa para los proveedores estadounidenses, que estaban molestos con la medida. “Lo permitimos porque no era una cuestión de seguridad nacional”, dijo.
Pese a que el anuncio ha levantado muchas expectativas, estos primeros comentarios no han esclaricido del todo el panorama. Según reporta la prensa local, el asesor económico de la Casa Blanca, Larry Kudlow, dijo el domingo en Fox News que la decisión de Trump no fue “una amnistía”. Repitió que Huawei puede reanudar la compra a empresas estadounidenses siempre que no …