Un equipo de científicos ha desarrollado un robot líquido capaz de atravesar barras metálicas, fusionarse con otros robots y capturar sustancias extrañas. Inspirado en el icónico T-1000 de Terminator 2, esta innovadora creación podría transformar el mundo de la robótica blanda y abrir nuevas aplicaciones biomédicas. ¿Estamos ante el futuro de la inteligencia artificial?