Si hubiera que pensar en el futuro del ocio electrónico es posible que, dentro de poco, el formato físico desaparecerá. Es pronto para saberlo, pero las conexiones a internet son cada vez más veloces y robustas como para apostar por el contenido digital. También en los videojuegos, en donde se empieza a observar modelos de suscripción. Microsoft no quiere perder ese tren con Xbox Games Pass.
Se trata de un nuevo servicio ideado por la compañía americana que, al igual que sucede con plataformas tipo Netflix, el usuario accede a un catálogo limitado de títulos mediante el pago de una suscripción mensual. En este sentido, dará acceso a un catálogo de más de 100 juegos de la consola de sobremesa Xbox One -retrocompatibles de la 360- por 9,99 euros al mes. Una cantidad que oscila en torno a otras plataformas pertenecientes a áreas tan distintas como la música o el cine. Llegará en primavera bajo este modelo de pago, pero el nuevo servicio de Microsoft no contempla la posibilidad de consumir videojuegos vía «streaming». Por su excesivo tamaño en muchas ocasiones y las condiciones individuales de cada conexión en red podría dificultar un buen rendimiento.
Es por esta razón por la que Microsoft ha descartado este forma de descarga de contenidos. «Basándonos en los comentarios de los seguidores, los problemas de streaming y conectividad se identificaron como la preocupación principal para los servicios de suscripción de juegos de la competencia», aseguran desde la empresa americana. Por este motivo, los …