Alerta de spoiler: no.
En 2014, ante las advertencias de fallas de seguridad en WhatsApp, una aplicación relativamente nueva llamada Telegram se convirtió en una alternativa como cliente de mensajería instantánea. Telegram alegaba usar cifrado fuerte para sus intercambios de mensajes, y ofrecía una alternativa que faltaba en otras aplicaciones: la posibilidad de tener chats "seguros" o "secretos", que no dejaban ningún rastro en sus servidores y se autodestruían después de cierto tiempo.
Inseguro por defecto
Durante meses, diversos especialistas en seguridad han manifestado que el cifrado de Telegram presenta fallas. Hace unos días, Edward Snowden hizo pública su preocupación con respecto a los protocolos de seguridad por defecto de Telegram.
El tema surge del hecho de que Telegram posee dos tipos de chats, uno llamado "de la nube", que es el chat por defecto y la única manera en la cual se pueden tener conversaciones grupales, y el chat secreto. Los mensajes de conversaciones en la nube son cifrados con MTProto, un protocolo de código abierto desarrollado por Telegram de manera independiente y desde cero, lo cual ya es un gran "no" en materia de seguridad. Pero el verdadero problema surge del flujo de proceso de este cifrado:Esto significa que los mensajes son cifrados antes de enviarlos a los servidores de Telegram. Pero el problema, como señala Moxie Marlinspike, investigador de seguridad asociado a Open Whispersystems, ha dicho:
"Almacenado bajo cifrado fuerte" es [una expresión] intencionalmente engañoso. El texto cifrado almacenado junto a las llaves en texto plano es texto plano (...) …