"Criónica" es la preservación de seres vivos a bajas temperaturas cuando la medicina actual no puede hacer nada por ellos, a la espera de conservarse hasta que existan nuevas formas de tratarlos médicamente y revivirlos.
Eso es justo lo que se intenta con 200 cuerpos de humanos en una locación en Scottsdale, Arizona, donde los clientes de Alcor Life Extension Foundation buscan ser criopreservados dentro de tanques de nitrógeno líquido con la esperanza de que puedan ser revividos cuando la ciencia ya haya avanzado lo suficiente.
Estos clientes, denominados "pacientes" por la compañía, eran principalmente enfermos terminales de cáncer, esclerosis lateral amiotrófica o sufrían de alguna otra enfermedad que no tiene cura actualmente.
Entre los casos de seres humanos criopreservados está Matheryn Naovaratpong, una niña tailandesa con cáncer cerebral de apenas dos años de edad, siendo la más joven en pasar por el proceso.
Un maniqui ilustra el proceso de "enfriado" de un cliente
La empresa Alcor es una compañía ubicada en las afueras de Phoenix, dedicada a preservar los cuerpos de quien quiera hacerlo. Actualmente tiene 50 años activa, teniendo como primer voluntario a James Bedford, veterano de la Primera Guerra Mundial.
Cómo es la criónica
De acuerdo con la compañía, el proceso comienza entre uno y siete días antes de la defunción del cliente, donde un equipo está listo para comenzar a trabajar casi inmediatamente de que el paciente sufre …