Luego de que se reconociera la existencia de informes de Fenómenos Aéreos no Identificados (UAP, por sus siglas en inglés), y que el Pentágono creara una nueva oficina para investigar los avistamientos y explicar en qué consistían, ahora el Congreso de los Estados Unidos está añadiendo un presupuesto a los Servicios de Inteligencia del país, con la intención de estudiar estos casos.
El Congreso considera que los UAP no son hechos por el hombre, y para analizarlos están incluyendo entre las actividades que debe realizar la Agencia de Inteligencia con el presupuesto del año fiscal 2023, entre las que se detalla el distinguir entre los objetos voladores no identificados (OVNIS), que sean de origen humano o no.
En el caso de aquellos que se clasifiquen como hechos por el hombre tras un estudio, no deberán incluirse en la definición de "fenómeno aeroespacial-submarino no identificado".
El cambio en la narrativa de los UAP
Vice detalla que esto marca un antecedente, pues hasta ahora funcionarios y políticos no habían confirmado oficialmente que los objetos no identificados podían ser de origen extraterrestre o extradimensional, a pesar de las evidencias y de que con la gran cantidad de informes recopilados, podían afirmarlo categóricamente.
Además, el Congreso también considera que las "amenazas transmedia" entre los dominios de la seguridad nacional del país se están expandiendo exponencialmente.
Las amenazas "transmedia de dominios cruzados" se refiere, según el Pentágono a aquellas …