Un innovador proyecto liderado por el MIT ha logrado acceder a una fuente de energía prácticamente infinita, ubicada a 20 kilómetros de la superficie terrestre. Este avance podría ser la clave para satisfacer la demanda energética mundial durante los próximos millones de años, con una fuente limpia y accesible. Descubre cómo esta tecnología puede transformar el futuro de la humanidad.