La Agencia de Misiles de los Estados Unidos ha puesto en marcha el sistema Glide Phase Interceptor (Interceptor en fase de planeo o GPI por sus siglas en inglés a partir de ahora). Una propuesta que lleva en conjunto con la fabricante de armamento Northrop Grumman y que tiene como objetivo establecer una serie de contramedidas para evitar que los misiles hipersónicos de otras potencias puedan impactar contra los territorios norteamericanos.Así, de acuerdo con Interesting Engineering, la empresa privada y el organismo público llevarían trabajando los últimos tres años en un diseño capaz de derrotar de forma efectiva las amenazas hipersónicas.En la actualidad, este tipo de tecnologías se han disparado por parte de los principales rivales de los Estados Unidos. Sobre todo China está trabajando en misiles hipersónicos y en otras armas que incluso podrían partir tanques solamente con el roce. En consecuencia, el país asiático se ha configurado como uno de los principales rivales del país norteamericano.Un plan ambicioso que quiere hacer que Estados Unidos mantenga su posiciónDespués de estos tres años de desarrollo, el GPI ha entrado en su siguiente fase de desarrollo que tiene como objetivo encontrar una compatibilidad entre las distintas tecnologías de lanzamiento de contramedidas que existen en la actualidad en los Estados Unidos. Para ello, han buscado un aliado inestimable en Asia: Japón. El país insular lleva siendo el más fiel de los aliados de EE. UU. en el Pacífico desde hace ochenta años. Por ello, no es de extrañar que se hayan apoyado …