A principios del año, la muerte de Gerald Cotten, fundador de la compañía de intercambio de criptomonedas canadiense QuadrigaCX, le causó un disgusto a varias personas. No provocó pena, sino rabia y sospecha, ya que Cotten supuestamente había muerto sin decirle a nadie la contraseña para acceder a los 190 millones de…Read more...