El iMac es uno de los equipos de sobremesa más reconocibles de Apple. Por su diseño, que integra toda la parte mecánica en la pantalla, evitamos el tener que buscar espacio en nuestro escritorio para la torre con la CPU y demás elementos. No obstante, aunque sigue llamando la atención, es imposible no pensar en que Apple lo ha ido abandonando poco a poco.

Nuestro compañero Javier Lacort publicó ayer un artículo llamado 'La década en que Apple olvidó al iMac'. Desde el 2010 hasta ahora hemos visto cambios físicos en todos los productos de la compañía. Y aunque el iMac disminuyó en grosor a principios de la década respecto a los anteriores modelos, su apariencia sigue siendo la misma que la de la versión de 2012, con marcos negros gruesos alrededor de la pantalla.

Como decimos, si comparamos los iMac de 2010, 2012 y 2019 de frente, es prácticamente imposible distinguirlos. Tendríamos que verlo de perfil para apreciar la diferencia de grosor y la falta de unidad de CD/DVD SuperDrive. Es por esto que muchos usuarios piden a Apple un lavado de cara al iMac, a pesar de que se desconoce si la compañía tiene planes para él. De momento, ya hay quien imagina cómo sería un modelo actualizado del todo en uno.

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