Te están quitando las muelas del juicio, esas odiosas piezas que solo se inventaron para hacerte sufrir. El ortodoncista no te duerme; solo sientes movimientos en tu boca que, imaginas, son ligeros. De repente, escuchas ¡crac! y ves cómo un diente blanco, lleno de sangre, está en medio de las pinzas. El diente es lo de menos; el sonido es el que queda grabado en tu mente los siguientes días y acompaña tu dolor e inflamación en los cachetes.
Sin embargo, no es algo exclusivo de tus muelas. El cuidado bucal es, por raro que parezca, muy preciso, y debes seguir las reglas si no deseas ir constantemente al dentista. Una cosa básica es, justamente, el lavado dental, que debes tomar como un ritual con pasos específicos para cuidar adecuadamente tus piezas dentales. Aquí te explicamos qué dice la ciencia.
Cuál es el orden correcto para lavarte los dientes
Quizá no recuerdes las pláticas en la escuela sobre cómo lavarte los dientes, pero aquí te explicamos cuál es la forma ideal de cepillarte. Todo esto con base en una investigación publicada en el Journal of Periodontology, en la que la doctora Fatemeh Mazhari y su equipo de investigación seleccionaron un grupo de estudiantes de odontología que se abstuvieron de utilizar cualquier técnica de higiene bucal durante 48 horas.
Posteriormente, comienza lo interesante: se les pidió que se cepillaran con una pasta dental con flúor y, a continuación, utilizaran hilo dental. Con esto, …