Un drone desarrollado por ingenieros de la Universidad Ben-Gurion de Israel es capaz de extraer datos del parpadeo de un LED del disco duro un PC, según han publicado en Wired. Con este experimento se ha demostrado una técnica de espionaje capaz de derrotar un sistema de seguridad conocido como "air gap", utilizado para mantener sistemas informáticos seguros separándolos de Internet.
El LED de un disco duro funciona con un patrón de códigos similar al morse, con señales de encendido y apagado. Aprovechando este patrón, los investigadores descubrieron que podían mover datos a velocidades de 4.000 bits por segundo, casi un megabyte cada media hora. Puede no parecer mucho, pero es suficiente para robar una clave de cifrado en segundos. Incluso se podrían guardar esos mensajes ópticos para decodificarlos más tarde.
Ahora bien, para poder utilizar este método de robo de datos es necesaria la intervención humana. Se necesita a una persona que esté trabajando con el ordenador que se quiere espiar, que tenga acceso físico a él y que pueda introducir un malware capaz de manipular el encendido del LED para enviar mensajes en código a los hackers. Cualquier malware que consiga privilegios de usuario podría hacerlo, según el medio.
La técnica no tiene un rango tan limitado como el de otros sistemas que se aprovechan de los ruidos del disco duro, o incluso del ruido del ventilador, para saltarse el air-gapping. Saber a qué datos accede la máquina también es más …