Varapalo inesperado. La firma Oculus VR, subsidiaria de Facebook, ha sido condenada a pagar 500 millones de dólares (460 millones de euros) por haberse aprovechado de la tecnología de ZeniMax en el diseño del dispositivo de realidad virtual. El jurado encontró parcialmente culpable al gigante de internet en una sentencia hecha pública este miércoles.
En un documento al que ha tenido acceso la agencia AFP, los miembros del jurado de Texas (EE.UU.) consideraron que Oculus VR, empresa adquirida por Facebook en 2014 por 2.000 millones de dólares (1.850 millones de euros), robó parte de los diseños de las gafas de realidad virtual que se empezaron a comercializar el pasado año.
La condena, sin embargo, recoge una indemnización menor a la exigida por la empresa de juegos ZeniMax, que reclamaba 4.000 millones de dólares. Fue en 2014 cuando presentó una denuncia contra Oculus, justo después de hacerse oficial la compra por parte de Facebook en una de los mayores movimientos tecnológicos de los últimos tiempos.
Durante el juicio, representantes de ZeniMax argumentaron que algunas de sus patentes, códigos de programación informáticos y otros aspectos técnicos acerca de la realidad virtual fueron utilizados por un exempleado que desempeñó un papel fundamental en el desarrollo del dispositivo Oculus Rift. En su defensa argumentaron que la empresa de Mark Zuckerberg «debería haberse dado cuenta» de esta situación controvertida en el momento de decidir la adquisición.
Cuando el propio Zuckerberg intervino en el juicio, abogados de ZeniMax trataron de empujar al magnate …